Tras los dos artículos anteriores en los que expusimos el potencial que ofrecen los elementos prefabricados de hormigón atendiendo a los primeros mecanismos que permiten optimizar los objetivos de la economía circular (reutilización y reparación), en esta ocasión nos centraremos en la refabricación (del inglés, remanufacturing).
La refabricación consiste en seleccionar productos o componentes ya utilizados, limpiarlos, repararlos y finalmente combinarlos para fabricar un producto que adquiera prácticamente la condición de nuevo. Un ejemplo cotidiano serían los teléfonos móviles re-acondicionados, o la compañía automovilística Volvo que recupera componentes antiguos que acondiciona para su empleo en la producción de nuevos coches.
Aunque se parte de productos usados, éstos se desmontan totalmente aprovechando aquellas partes que aún están útiles y sustituyendo aquellas que estén inservibles. Todo esto se lleva a cabo bajo un proceso industrial.
El producto no sólo se repara sino también se actualiza a una condición de nuevo para que sea suministrado con unas determinadas garantías.
Estos nuevos productos pueden contar con un diseño o una tecnología mejorada respecto a versiones anteriores. Tienen que ofrecer las mismas garantías y prestaciones a si fuera un producto original, y tener unos costes menores a si fueran nuevos, para que sea una opción económicamente atractiva.
Figura 1.- Jerarquía en la gestión de residuos (Fuente: Comisión Europea)
Potencial de los elementos prefabricados de hormigón atendiendo a su refabricación
Aunque sólo se distingue en la supresión de una letra respecto a la prefabricación, es quizás la que ha tenido un menor alcance hasta ahora en nuestra industria, dentro de las tres vías de la circularidad que no implican una transformación significativa del producto para ampliar su vida útil.
En este caso podríamos empezar por referirnos no a los elementos prefabricados en sí, sino a algunas de las máquinas e instalaciones que configuran las plantas de fabricación, cuyos costes de adquisición son relevantes y se trata de extender su funcionamiento el máximo periodo de tiempo posible para amortizar la importante inversión. Con motivo de su utilización continuada, estos equipos sufren el lógico desgaste, por lo que además de ejercer un mantenimiento preventivo para ralentizar su deterioro y que no haya paradas imprevistas, es inevitable la reposición de algunas piezas para alargar su vida operativa.
Respecto a los propios elementos prefabricados de hormigón, un buen ejemplo lo presentan las tuberías de hormigón empleadas en las redes de saneamiento y drenaje, cuando por razones de incrustaciones que se van acumulando con el paso del tiempo en las paredes interiores generando una rugosidad excesiva, se les realiza una limpieza interior y se recubren de material plástico. Con esta realización, los conductos de hormigón siguen manteniendo la función resistente y con este acondicionamiento aumenta la capacidad de desagüe y se evita la ejecución de una nueva obra.
Figura 2.- Tubo de hormigón recubierto con una lámina plástica para mejora de sus prestaciones
Diseño de los elementos para facilitar su refabricación
Sin embargo, podríamos asegurar de forma generalizada que, en los productos de construcción, la refabricación no ha sido especialmente considerada como factor de diseño, puesto que los productos igual que los sistemas constructivos que los incorporan, deben garantizar una vida útil acorde a las exigencias reglamentarias (por ejemplo, en el caso de las estructuras prefabricadas de hormigón: 50 años en edificios y 100 años en infraestructuras) [3].
No obstante, toda esta ola de cambio social que tenemos, implica entre otras consecuencias que incluso con las viviendas que habitamos nos cansemos antes de que finalice su vida útil y queramos cambios sobre las mismas, por lo que la refabricación puede adquirir una mayor importancia en los años venideros [4].
En este sentido, hay determinados factores que se consideran en el diseño para la refabricación y que la prefabricación de hormigón presenta una mejor base para actuar:
- Adoptar una visión holística en el diseño del producto (considerando todo el ciclo de vida de los recursos).
- Dividir los elementos compuestos en módulos o elementos fácilmente reemplazables.
- Tener en cuenta la facilidad con la que el producto puede ser desmontado, actualizado, limpiado y gestionado, prevaleciendo las conexiones mecánicas a las uniones soldadas o pegadas.
- A efectos de trazabilidad, agregar un identificador al producto para poder comprobar en cualquier momento qué elemento es, por ejemplo, con sensores embebidos o códigos QR.
- Utilizar materiales fuertes y durables, algo inherente al concepto de prefabricado de hormigón.
- No incorporar ningún producto químico que pueda ser prohibido más adelante.
- Todas las partes del producto deben soportar los mismos productos químicos de limpieza, temperaturas y herramientas de limpieza.
- Utilizar elementos y medidas estandarizadas para facilitar una futura actualización e intercambio de piezas.
Figura 3.- Un panel prefabricado de hormigón sándwich, con el aislamiento térmico incorporado y con los huecos para la carpintería hechos de fábrica, podría ser un buen ejemplo de elemento constructivo previsto para su refabricación futura, pudiendo ser tratado superficialmente para mejorar su comportamiento ante las inclemencias climatológicas, adquirir nuevas prestaciones (véanse emulsiones fotocatalíticas para dotarle de capacidad descontaminante), cambio de estética (pintado) o restitución de carpintería y ventanas, tareas que podrían realizarse directamente sobre el elemento colocado en fachada o desmontado provisionalmente para mayor facilidad
Sin embargo, la mayoría de la legislación actual alienta a que los productos se envíen para su reciclaje, que será el tema con el que cerremos esta serie de artículos en la próxima entrega.
[1] La economía circular y los prefabricados de hormigón – La reutilización https://www.andece.org/la-economia-circular-y-los-prefabricados-de-hormigon-la-reutilizacion/
[2] La economía circular y los prefabricados de hormigón – La reparación https://www.andece.org/la-economia-circular-y-los-elementos-prefabricados-de-hormigon-la-reparacion/
[3] Vida útil nominal de los diferentes tipos de estructura. Tabla 5.1. Instrucción de hormigón estructural EHE-08
[4] Las viviendas del futuro serán de usar y tirar. El mundo. 16/02/21 https://bit.ly/3ulElWq