Durante los últimos años, muchos sectores relacionados con la construcción han evolucionado de manera extraordinaria, siendo la industria del prefabricado de hormigón uno de los principales artífices de esta modernización, adaptándose, cuando no anticipándose, a las distintas tendencias que el mercado ha ido imponiendo.
Sin duda, la digitalización y la sostenibilidad representan actualmente los dos principales retos. Por un lado, la digitalización abarca, o más bien ofrece, una enorme cantidad de herramientas que permiten un mayor control de todos los procesos constructivos, desde la concepción inicial del proyecto hasta que éste se materializa. Y por otro, la sostenibilidad como concepto holístico que engloba a un sinfín de parámetros agrupados por su contribución a la realización de obras con el menor impacto ambiental, su beneficio social y justificables económicamente; en este último caso, la necesaria descarbonización para cumplir con los objetivos intermedios (2030) y finales (2050) de neutralidad climática en Europa, es sin duda el mayor reto que se nos presenta, aunque de ello hablaremos en otros artículos del blog por la enorme trascendencia que tiene y para lo que ANDECE ha programado siete sesiones de debate a lo largo de este año [1].
Tomando como referencia el informe de Sto analizado en la Revista Obras Urbanas sobre las principales tendencias que marcarán el devenir de la construcción en estos próximos 12 meses [2], hemos querido hacer nuestra propia reflexión sobre cómo la industria de fabricantes de productos prefabricados de hormigón está capacitada para proporcionar una respuesta eficaz a este conjunto de tendencias:
- Elementos y sistemas eficientes energéticamente: la última revisión del Documento Básico de Ahorro de Energía del CTE de 2019, que establece ya por fin que todos los nuevos edificios sean de consumo de energía casi nula (calificaciones energéticas A en la mayoría de las zonas climáticas), propició la necesidad de profundizar en el diseño energético combinando todas las medidas posibles. En este sentido, la inercia térmica del hormigón y la activación de estructuras, además de la integración del aislamiento térmico dentro de los paneles prefabricados de hormigón para maximizar la industrialización de los edificios, son soluciones sobre las que ya se venía apuntando un aumento en su demanda para cumplir con este exigente requisito reglamentario [3].
- Impulso de la generación de energía solar fotovoltaica: celdas solares integradas en paneles prefabricados de fachada, o soportes prefabricados de hormigón utilizados en parques solares, son dos soluciones en prefabricado de hormigón que apuntan a un crecimiento a medida que la generación fotovoltaica continúe su progresión.
- Asentamiento de la construcción industrializada: es indudablemente la tendencia sobre la que la prefabricación de hormigón tiene unos vínculos más estrechos. La necesidad de dar mayor impulso a la sostenibilidad, la digitalización y la automatización en la construcción continuarán poniendo en el punto de mira al modelo industrializado, tanto en obra nueva como en rehabilitación, gracias a las ventajas que aporta: optimización de los tiempos de producción gracias a trasladar a la fábrica un mayor ratio de los elementos constructivos, reducción del impacto medioambiental de la construcción y creación de empleos mucho más especializados, seguros, atractivos e inclusivos [4].
- La realidad virtual y aumentada para la visualización de los proyectos. El uso del software BIM lleva desde hace años implantado en las empresas de fabricantes de prefabricados, especialmente cuando acometen el proceso constructivo completo (diseño → fabricación→ logística → ejecución) para tener un control estricto sobre todos los componentes de la obra [5].
- Nuevos materiales: la innovación es parte esencial de la industria del prefabricado, siendo durante las últimas décadas un laboratorio de pruebas permanente, buscando siempre nuevas materias primas que agregar a la mezcla del hormigón, para alcanzar la máxima optimización entre prestaciones-costes-huella ambiental.
- Vuelven las “curvas”: aquí cabe destacar la flexibilidad en el diseño que aporta un material como el GRC (hormigón armado con fibra de vidrio), que permite materializar diseños vanguardísticos gracias a su flexibilidad y donde las empresas fabricantes asociadas han alcanzado un nivel de excelencia reconocido internacionalmente [6].
Por todo lo anterior, el año 2023 va a ser un año clave en el que tendencias como la digitalización, la descarbonización o la aplicación de la tecnología, servirán de estímulo para la auténtica consolidación de la industria del prefabricado de hormigón como referente en una construcción cada vez más exigente, digital y comprometida con la defensa del medio ambiente.
Referencias
[1] Desayunos 2023 Tecnología y descarbonización. ANDECE https://www.linkedin.com/feed/update/urn:li:activity:7018131131552215040
[2] Ocho tendencias que marcarán la construcción y la arquitectura en 2023. Revista Obras Urbanas https://www.obrasurbanas.es/ocho-tendencias-que-marcaran-la-construccion-y-la-arquitectura-en-2023/?utm_source=mailpoet&utm_medium=email&utm_campaign=newsletter-obras-urbanas-no-2-2023
[3] Guía técnica de aplicación del CTE a los elementos prefabricados de hormigón. ANDECE https://www.andece.org/wp-content/uploads/2021/12/Guia-Tecnica-de-aplicacion-del-CTE-a-elementos-prefabricados-de-hormigon.pdf
[4] Manifiesto por la construcción industrializada con prefabricados de hormigón. ANDECE https://www.andece.org/wp-content/uploads/2019/10/Manifiesto-ANDECE-por-la-Edificacion-Industrializada-Sostenible.pdf
[5] Guía BIM para empresas de prefabricados de hormigón. ANDECE https://www.andece.org/wp-content/uploads/2021/04/Guia-BIM-para-empresas-de-prefabricados-de-hormigon-V.5.pdf
[6] GRC: la versión más artesanal del prefabricado de hormigón. Revista CPI https://bit.ly/3QAkbmY